Los habituales ya sabéis de mi debilidad por Steve Gerber.
De sus trabajos, adoro sus números de Man-Thing o cómo hacer un tebeo original y desbordante de ideas marcianísimas con un protagonista que es un puro espectador de tragedias y dramas personales.
Uno de sus números más recordados era Song-Cry of the Living Dead Man, sobre la crisis nerviosa de un publicista. Gerber hacía cosas tan extrañas para la época como meter una página de texto en plan escritura automática. Gerber también hizo que Howard el Pato tuviera una crisis nerviosa, por cierto.
Decían que el publicista era un reflejo de propio Gerber
Hace muchos años, finales de los ochenta o principios de los noventa, se habló de una novela gráfica que sería una continuación de ese episodio y que dibujaría Kevin Nowlan. En el Marvel Age salió publicado algún dibujo y todo. Yo ya lo daba a estas alturas por un proyecto perdido, y más cuando Gerber falleció hace unos años. Y al final se acabó. Explican que hubo problemas, que Nowlan tardaba una semana para pintar una página, que hubo parones varios... Supongo que la desaparición de la línea de novelas gráficas debió de influir lo suyo, entre otras cosas.
Nowlan hace un gran trabajo aunque su versión del Hombre-Cosa tan lisa, tan "elefante", no me convence mucho. Prefiero la de Arthur Adams en las portadas.
Gerber volvió a sus personajes como si no hubieran pasado los años. O sí, porque hace envejecer a Lazarus y aprovecha para arreglar cuentas con sus años de series de animación mediocres.
Cuando hablan de Gerber siempre dicen que era un genio y que estaba loco.
Lo segundo no lo sé pero sí lo primero.
Qué gusto poder llegar a leer una nueva historia del Hombre-Cosa de Gerber.
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