Ya lo he dicho antes, Giménez se va despidiendo de sus series, es consciente de su edad y se nota.
Este álbum es un nuevo encuentro de dibujantes de cómics. Podemos reconocer a Carlos Giménez, Adolfo Usero o Enrique Ventura, por ejemplo. Pero esta vez hablamos del presente, no de los años 60. Y no nos encontramos los mismos "alias". Giménez no es Pablo ni Usero es Adolfo, como en los álbumes anteriores. Por eso, uno tiene la sensación de que tiene mucho más que ver con obras como "Crisálida" que con los anteriores de "Los profesionales".
La trama es mínima. Cuatro dibujantes veteranos se reúnen para cenar en un bar de confianza, y hablan y hablan. Del pasado, de sus mujeres, de sus problemas de carácter o económicos, de la profesión, de la gente que han conocido, de los que les caían bien, mal o regular.
Hay que ser muy bueno, para que con 80 años cumplidos, se lea tan bien pese a que uno sea consciente de que las habilidades actuales no son las que fueron. Y esto es mérito sobre todo del Giménez escritor, que siempre me ha parecido con un gran oído para los diálogos, vivos, frescos, con chispa.
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Habrá que leerlo, Carlos Gimenez es lo que Jan quería ser de mayor y no fue capaz .
ResponderEliminarCarlos,al contrario que el otro ,quiere a sus personajes y los despide de forma digna.
Lo único que no me gustó fue lo que pasó con Iris en punto final y cuando el mundo agoniza.
También el pobre Gringo tuvo un final agridulce, aunque menos traumatico que el bueno de Dani Futuro.
JAN quiere a sus personajes. Lo que ocurre es que no ha sabido o no ha podido defender sus derechos como Carlos.
EliminarDe ahí que haya terminado quemado y "puteado" por sus editores industriales y haya dejado caer a SUPERLOPEZ, que por otra parte ya no tenía razón de ser.